Junto a la pandemia causada por el Covid-19 que no terminará de pasar hasta que se logre una vacuna, tenemos a las puertas la llegada de enfermedades como la Influenza y El Virus Respiratorio Sincitial además de las Enfermedades Diarreicas Agudas.
En Lo Que Va De La Pandemia Hemos Salido Con Buena Nota.
Los resultados de la estrategia impulsada por las autoridades de salud han sido de muy alta calidad: El número de casos que han requerido cuidado intensivo no han hecho que colapse la atención del nivel más complejo, la curva de casos activos llegó a su máxima altura entre el 11 y el 15 de Abril, luego empezó a descender alcanzando el mínimo entre el 9 y 12 de Mayo, el porcentaje de fallecimientos entre los casos detectados alcanza únicamente el 1 %, la cual es mucho más baja que en muchos países industrializados por lo que el Ministerio de Salud decide relajar las medidas de confinamiento.
Ya podemos contar entre los logros del cuido de las madres y los recién nacidos el hecho de que se presentó en Abril el nacimiento de una bebé hija de una madre positiva para SARS-Cov2, la niña fue negativa y se le dio de alta en buen estado de salud junto con la madre, tras de haber iniciado la lactancia materna en el Hospital San Juan de Dios. Dos hechos que se esperaban ya que el virus no se transmite de la madre al feto y la lactancia debe hacerse con medidas de higiene por parte de la madre como lavado de manos y el seno así como el uso de mascarilla. Aun no se conoce en que momento de la enfermedad una madre tiene la capacidad de pasarle anticuerpos contra el Coronavirus al niño a través de la leche materna, pero por el comportamiento con otros virus es esperable que en algún momento se conozca con detalle. Este caso también demuestra que si una madre lactante adquiere el virus no debe interrumpirse la lactancia materna, sino acudir al uso de mascarilla para la madre en el momento del amamantamiento.
INFLUENZA
En cuanto a la Influenza la mejor protección para el lactante en los primero seis meses es que la madre se vacune durante el embarazo de tal manera que el bebé, tenga anticuerpos que pasan a través de la placenta y esperar la vacuna del bebé a los 6 meses. También es conveniente que el resto de la familia que convive con el nuevo miembro se vacunen, haciendo un cerco de inmunidad alrededor de él.
VIRUS RESPIRATORIO SINCITIAL
Para el virus respiratorio Sincitial que junto a la influenza causaron más muertes de las esperadas durante el 2019, no existe vacuna y puede hacer colapsar los espacios disponibles para cuidado intensivo de niños como ya ha sucedido en años anteriores. Allí si contamos con anticuerpos que pasan a través de la leche materna y disminuyen el riesgo de adquirir la enfermedad.
LAS ENFERMEDADES DIARREICAS AGUDAS
Las enfermedades diarreicas se previenen también con las mismas medidas de higiene de manos con las que se previene el contagio de Covid-19, además de existir la vacuna contra el rotavirus que aplica la CCSS en los cuatro primeros meses de vida. La lactancia materna juega un papel crucial en la prevención y el tratamiento de las enfermedades diarreicas al respecto hay que decir que la ingesta de la leche materna es como una vacuna diaria para el bebé.
LACTANCIA MATERNA Y LA ECONOMIA FAMILIAR DURANTE LA
PANDEMIA
Con el descalabro económico que ha significado la Pandemia es imprescindible lograr que se incremente el número de madres que dan de mamar y no dejen los a veces exiguos
ingresos de las familias a cambio de productos que no alcanzan ni alcanzarán la calidad y disponibilidad de la leche materna.
Un niño o niña alimentados exclusivamente con fórmula requiere no menos de 700, 000 Colones en el primer año.
Autor: Dr. Rolando Celada Quezada